Marisa era una chica colombiana, vivía en el centro de la ciudad, y su sueño era estudiar la carrera de odontología en España. No era una chica demasiado rica pero tampoco pobre y tuvo el suficiente dinero como para poder ir a estudiar a España.
Luis era un chico español, no le gustaba mucho relacionarse con gente extranjera porque les consideraba "diferentes" a el. El quería estudiar farmacia.
Cuando Marisa llegó a España se sentía muy sola, tenía que trabajar y estudiar al mismo tiempo y apenas conocía a nadie aquí. Al tiempo, Luis se fijó en ella en la biblioteca y comenzaron a hablar.
A medida que pasó el tiempo ella le enseñó muchas cosas de su cultura, hizo cambiar la mentalidad de el contra los inmigrantes. El la ayudó a adaptarse, a no sentirse sola y que fuese capaz de seguir adelante sin tener a su familia.
Marisa terminó la carrera a los 5 años y ahora es una gran odontóloga, consiguió trabajo y gracias a eso puede a menudo viajar a su país a ver a su familia.
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